Un sueño hecho realidad

8 PARTE 

Pasamos algunas horas de la noche conversando sobre si se harían o no los buceos y nuestras alternativas; nos retiramos a descansar y efectivamente, el domingo a eso de las 3 de la mañana nos despertó el sonido fuerte del oleaje del mar, las ráfagas de viento y la caída constante de lluvia.

Foto Cyana Todo Buceo

Para la hora del amanecer aminoró pero bajo esas condiciones era imposible la salida al mar. Así que lo tomamos de la mejor manera disfrutando del viento, de la lluvia que llenaría los pozos del lugar, recorriendo la playa y pasando el día entre amigos.

Foto Cyana Todo Buceo

Aprovechamos para limpiar nuestros equipos, dejarlos secar con el aire mientras conversábamos con Leonardo y Richard así como sellábamos nuestras bitácoras, tomarnos las fotos oficiales en el mapa de los sitios de buceo y tuvimos mucho tiempo para hacer nuestras maletas ya que al día siguiente muy temprano antes del amanecer pasaría por nosotros Homar para llevarnos al Aeropuerto de La Paz.

Fotos Cyana Todo Buceo

Fuimos por supuesto a la terraza del restaurante que está a la orilla del mar a documentar el Huracán Marie y viendo la situación esperábamos que al día siguiente en la Paz el Aeropuerto estuviera abierto para los vuelos, como Homar no había mandado mensaje supusimos que todo estaba con forme al plan.

Video Cyana Todo Buceo

Nuestra última comida fue de los más deliciosa, tranquila y fresca pues siguió lloviendo todo el día y mucha parte de la noche.

Foto Cyana Todo Buceo

Amaneciendo el día lunes podíamos ver todavía lo oscuro de las nubes de tormenta y una ligera llovizna.

Fotos Cyana Todo Buceo

Homar estuvo muy a tiempo por nosotros y pues todas las despedidas son tristes, más cuando dejas un pedazo de tu corazón en el lugar.

Foto Cyana Todo Buceo

El amanecer nos sorprendió con hermosos rayos de sol a través de los vidrios de la camioneta y luego de unas fotografías y un poco de conversación todos nos quedamos dormidos.

Fotos Cyana Todo Buceo

Llegamos al aeropuerto, nos despedimos de Homar agradeciendo toda su amabilidad, checamos equipaje y nos fuimos a desayunar, el regreso a la Ciudad de México fue tranquilo y aprovechamos las horas del vuelo para poder descansar un rato.

Continuará…